Equipo 1

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Actividad realizada por Elizabeth Chiuyare Cervantes



 LA HUACHUA Y EL ZORRO[1]


Un zorro muy hermoso, de poblada cola y afiladas uñas, con más astucia que un gavilán, hurtó quinua y trigo de un tendal, con el que armó una buena trampa, en cuyas redes cayeron innumerables avecillas. Introdujo a todas dentro de un costal de jerga y se las llevó vivitas a su prole, para adiestrarla en el arte de la cacería.
Caminaba taciturno y encorvado por tanto peso, hasta que no pudiendo más, a media jornada, resolvió dejar la carga en casa de su comadre espiritual, una señora alta y bien parecida, de plumaje blanco y pata colorada, moradora a orillas de una gran laguna.
Entablóse entonces el siguiente diálogo:
—Comadre huachua, te dejo esta carga para que me hagas el favor de guardármela hasta mi regreso; pero sin tocarla; será un favor que te lo agradeceré en el alma.
—Compadre zorro, no tengo inconveniente en servir a un tan apuesto e inteligente caballero.
Dio las gracias el zorro y partió alegre, dejando el saco. Sola la huachua, curiosa como buena  mujer, desata el nudo que aseguraba el saco y ¡zas...!
¡Oh, sorpresa! Empluman un gran frailesco, gaviotas, zorzales y gorriones, y toman vuelo.
Desaforada la huachua, a aletazos pretendía impedir la fuga; pero fue en vano, porque ninguna quedó.  Jamás huachua alguna se vio en trance tan amargo. Daba graznidos lastimeros y extendiendo sus pesadas alas corría desalentada de un sitio a otro, lamentando su desgracia y pensando a la vez en la venganza que tomaría el astuto de su compadre.
Pasado su aturdimiento le vino una feliz inspiración y se decidió a ponerla en práctica, llenando el saco de espinas, que cuidadosamente cubrió con yerbas y otras malezas.
Al crepúsculo, cuando el Sol majestuosamente comenzaba su descenso tras las colinas, regresó el zorro, y como no estuviera presente la comadre, se echa a cuestas su carga, y marcha en dirección a su cueva.
Mas, siente sumamente pesado el saco y sobre todo que le pinchan los lomos; pero soporta impasible los hincones, con la ilusión de que poco le falta para llegar a la casa, donde tomará sucu-lenta cena en unión de la señora y sus cachorritos.
Caminaba corcoveando con su carga y exclamando: ¡Ay!, cómo me hincan las uñas de los pajaritos. ¡Ay!, cómo me punzan las patas de los pajaritos. Impaciente por su tardanza, le esperaban en el dintel de la cueva la zorra y sus hijuelos, que al verle, locos de contento saltan, brincan, se aparragan, se revuelcan y la muy señorona muellemente recostada lamía y relamía llena de satisfacción su afilado hocico.
El fatigado zorro siempre gruñendo exclamaba: ¡Ay!, cómo me punzan las patas de los pajaritos. Llegó a la feliz morada, y cual una avalancha se precipitan sobre el magnífico presente, madre e hijos, para aligerar tamaña carga; pero retroceden cariacontecidos al contacto de las uñas de los pajaritos.
El zorro ensangrentado y muerto de cansancio arrojó su carga al suelo ordenando antes se coloquen en acecho en la entrada para evitar la fuga de las palomitas y gorriones, y se abalanzan a su voz de mando.
Vacía el saco y a la voz de orden se lanzan sobre la yerba que lo cubría, pero ¡oh, dolor!, ¡qué chasco!, no había tales zorzales ni palomitas, sólo enormes matas de espinas llevan prendidas en el hocico y manos.
Quedaron desconcertados, dando aullidos lastimosos y enternecedores. Pasaron la noche, hambrientos, doloridos y heridos, relamiéndose el hocico, lamentándose de su mala fortuna y de su negra suerte.
Caviloso el zorro, pensó en vengarse; mas no regresa en el momento temeroso de no poder dar caza a la comadre para castigar tan inicua broma sino que, pasados dos días, se presentó en las cercanías de la casa de la comadre, jurando interiormente comérsela en unión del ahijado. Pero ésta no bien distingue al compadre, de un vuelo se precipita a la laguna, en la que, tal era su miedo, no se creía todavía segura y dando zambullones se internaba hacia adentro.
El muy resabido del compadre le decía a gritos que había regresado con otro encargo para suplicarle se lo guardase y le juraba, por el santo bautismo de su hijo, no le guardaba rencor ni tomaría venganza por la broma que le había jugado.
La huachua, que en más de una ocasión había escapado con vida de las caricias apetitosas del compadre, no dio crédito al tono hipócrita de su socarronazo compadre, sino que seguía nadando y zambulléndose, y cada vez más adentro.
Desconcertado y violento el zorro, se propuso desaguar la laguna y dio comienzo a su tarea: con patas y hocico rasguñaba el suelo, resuelto a abrir una zanja; pero pronto hubo de renunciar a su temerario empeño porque se le gastaron las uñas y le acometió el cansancio.
Piensa en otro medio, y como la cólera lo ciega, resuelve beberse toda el agua de la laguna, y bebe; pero bien pronto se convence que el agua se le salía del mismo modo que entraba, así que se decide a taparse el ano, para lo que coge una coronta y se tapona. Obstruido el canal de salida, loco de furia, con más ardor bebe y bebe el agua, sin meditar que esta nueva zorrada le va a ocasionar la muerte, porque inflándosele el vientre revienta como una vejiga llena de aire.
En sus agonías prorrumpía en lastimeros ayes y tiernas imprecaciones, que el eco repetía: ¡Huachua, huachua de pata colorada!, todavía me hincan las uñitas de los pajaritos, ¡ay, ay!, ¡me punzan las patas de los pajaritos!


FIN






Título                                        
La huachua y el zorro
Compilador                                                    
Adolfo Vienrich De la Canal[1]
Tipo de cuento                       
Fábula
Sinopsis                                   
Un zorro cazó unas avecillas para enseñarle a sus hijos dicho arte, pero debido al peso de la carga, decidió dejarla donde su comadre la huachua mientras continuaba su labor. Ésta, por curiosidad, abrió el costal donde estaban atrapadas las aves y las dejó escapar de forma accidental. Temerosa de la venganza del zorro, llenó el costal de espinas y las escondió entre la maleza. Llegó el zorro y se llevó el saco para su casa. Durante todo el camino, sufrió las punzadas de las espinas pensando que se trataba de los picos y patas de las aves. Al llegar a casa, dio la orden de que toda la familia se abalanzara sobre el saco provocando un gran dolor en todos ellos. El zorro decidió vengarse de la huachua. Realizó varios intentos primero engañándola y luego amenazándola, pero lo único que logró fue dañarse a sí mismo.
Enseñanza                               
La venganza es mala consejera. No soluciona los problemas, sólo te hace sentir peor.


PROPUESTA DE ACTIVIDAD


Objetivo general          
Mejorar la convivencia escolar entre los estudiantes.
Objetivos específicos[2]                        
·         Reflexionar sobre las actitudes que se adoptan cuando uno se siente con poder sobre otros.
·         Identificar las causas y consecuencias de las reacciones que no favorecen la convivencia escolar.
·         Proponer alternativas de reacción acordes con la búsqueda de una mejor convivencia en el aula.
Público                           
Estudiantes de entre 13 y 14 años que se encuentren cursando el 2º de ESO. Se sugiere un grupo de 25 miembros como máximo.
Duración                        
2 horas
Materiales                     
·         Fábula La Huachua y el Zorro
·         5 papelógrafos
·         Una pizarra
·         Plumones de pizarra
·         Plumones gruesos de colores
Procedimiento            
Antes de la sesión
Se dividirá el aula en dos grupos. A uno, se le pedirá que investigue sobre la huachua y al otro, sobre el zorro. Deberán identificar sus características físicas así como la cosmovisión andina sobre el animal que les ha tocado.
1.      “Yo te mando. Tú, obedeces”                                        (15 minutos)
·         Se formarán grupos de 5 personas. Cada grupo se encargará de indicarle a otro algo que deberá hacer. Así, cada uno tendrá el poder sobre otro, y también tendrá que obedecer lo que se le señale.
·         Lo esperable es que se impongan castigos, a pesar de que esa no fue la consigna. No obstante, el moderador les dirá que lo que ellos habían planeado como orden deberá ser acatada por ellos mismos.
·         Se reflexionará sobre las actitudes que afloran entre los grupos. Algunas veces son negativas ya que en lugar de procurar un beneficio, suponen un perjuicio para el resto.
2.      Análisis de la Fábula La Huachua y el Zorro               (35 minutos)
·         El moderador narrará la fábula.
·         Se formarán grupos de 5 personas. En cada grupo debe haber personas que hayan investigado acerca de ambos personajes.
·         En un papelógrafo deberán escribir acerca de: a) los personajes (descripción física, algún dibujo, la cosmovisión andina y el rol que cumplen en la fábula), b) los valores y antivalores presentes en la fábula, c) la parte que más les gustó y d) si tuvieran la oportunidad de variar algo, qué sería y por qué.
·         Cada grupo expondrá delante del resto. El moderador anotará en la pizarra las respuestas.
·         En plenario, el moderador realizará un análisis con los estudiantes identificando 4 partes: a) antecedentes (causa), b) emoción, c) conducta (reacción) y d) consecuencia.
3.      “Y si hubiera sido de otro modo…”                             (25  minutos)
·         En los grupos ya conformados, deberán modificar la fábula la cual intercambiarán con otro grupo. Tres grupos harán una que favorezca al zorro y los otros 2, a la huachua.
·         Analizarán la nueva fábula elaborada a partir de las cuatro partes: causa, emoción, conducta y consecuencia.
·         Cada grupo expondrá al resto sus respectivos análisis.
4.      “¿Huachuas,  zorros o ambos?”                                  (40 minutos)
·         En grupos identificarán una situación ocurrida en el aula en la que se haya actuado de forma similar a los personajes.
·         Analizarán la situación bajo el esquema de las 4 partes anteriormente empleado.
·         En plenario, cada grupo realizará una dramatización en donde expondrán tanto la situación como el análisis.
·         El resto de grupos propondrán alternativas para mejorar la convivencia.
5.      Cierre                                                                                   (5 minutos)
·         El moderador motivará a los estudiantes a expresar qué han aprendido del taller.
·         Cada uno, de forma personal y privada,  se comprometerá a diferenciarse de las actitudes de la huachua y el zorro.





[1] Nació en Lima el 18 de noviembre de 1867 y murió en Tarma, región del centro del Perú, el 29 de septiembre de 1908. Fue un reconocido y querido escritor,  folclorista y periodista. Dentro de una de sus obras compiladoras “Fábulas Quechuas” se encuentra la de La huachua y el zorro. Tomado de: http://es.wikipedia.org/wiki/Adolfo_Vienrich
[2] Correspondientes a la primera sesión del taller “Unidos por una mejor convivencia”.




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                                                           Actividad realizada por Erika Donoso N.

BULIRIA (Leyenda)

Había una vez un jefe panche que le preguntaba a su hija Bulira cada noche:
- Hija, ¿cuándo conoceré al príncipe elegido para poder enseñarle nuestros secretos, las fórmulas sagradas y la cueva del tesoro? No me queda mucho de vida, hija.
- Ay, padre, no hables así que me entristeces.
- Hoja, el tiempo pasa rápido, y los que envejecemos tenemos que buscar a quién entregar el poder.
 Un poco más allá de la aldea, al oeste, acampaba el príncipe Tota, con su guardia de honor, brujos y capitanes. Un poco más allá de la aldea, al este, estaba el otro pretendiente de la princesa, Opia, acompañado de su maestro y de un criado. No llevaba ni una lanza.
 Tota, para seducir a la princesa, hacía desfiles militares y torneos en su honor. Opia le enviaba pájaros de siete colores. Ella era amable con ambos, pero no se decidía. Totia comenzaba a enfadarse y hacía planes de conquista. Opia hallaba hermosa la espera.
 Una mañana, cuando Opia buscaba unos pescadillos en mitad del arroyo para Bulira, quien le miraba de forma cariñosa, apareció Tota y, lleno de celos, preparó su cerbatana y disparó. El dardo atravesó el cuello de Opia, quien cayó suavemente en las aguas y murió mirando a su amada con una sonrisa.
Bulira gritó de rabia, y Totia huyó asustado.
 Bulira lloró sin consuelo y sin descanso sobre el río. Vertió lágrimas hasta perder sus ojos, que se convirtieron en dos  grandes perlas de ostras doradas.
Y dice la leyenda que, desde entonces, el río Opia de Tolima se llenó de ostras, que son las lágrimas de Bulira, la enamorada ciega.

FIN
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Título                                         
Bulira
Adaptación                                                      
Ana  Garralón
Tipo de cuento                       
Cuento popular del pueblo Pache
Origen
En la frontera entre Ecuador y Colombia habitaba el pueblo de los Panche, junto a otras poblaciones indígenas, como los Coyaima o los Andaquí. No sobrevivieron a la conquista, pero algunas leyendas se conservan, como ésta, que explica la existencia de ostras en un río.[1]
Sinopsis                                    
Historia corta y sencilla que explica las razones por las cuales existen ostras en el río Tolima.  Cuenta de un triángulo amoroso entre la hija del sabio del pueblo y sus dos pretendientes. Las acciones de cada uno servirían para que Bulira escoja a quien sería su esposo y futuro poseedor de los conocimientos del pueblo.
Se habla de dos estrategias diferentes: El uno prefiere los pequeños detalles, mientras que el otro elige una conquista con pretensiones de grandeza.
Cuando la balanza de la joven empieza a inclinarse por el primero, los celos y la envidia hacen que el segundo acabe con la vida de su contrincante y con la historia de amor que empezaba a surgir. Las lágrimas de dolor se manifiestan en perlas de ostras que caen al río.

 PROPUESTA DE ACTIVIDAD

Objetivo general          
Reflexionar sobre cómo los pueblos explican su historia y realidad, a través de los cuentos, mitos y leyendas.
Objetivos específicos                       
·         Promover el interés por descubrir cuentos y leyendas para mantener los conocimientos populares y ancestrales.
·         Incentivar el interés por este tipo de manifestaciones culturales.
·         Analizar sobre los valores y eventos que se explican en las historias.
Público                            
Estudiantes de bachillerato de entre 16 y 17 años de edad.
Duración                        
Dos sesiones de una hora y media cada una.
Especificaciones de la actividad                 
·         La actividad se realizará en clases de literatura.
·         Tiene que ser un grupo no mayor a 20 alumnos.
·         La actividad se realizará en dos semanas (una sesión por semana).
Metodología           
PRIMERA SESIÓN: “¿Qué me quiere decir la historia?” (Duración 1:30)
 1.       El profesor leerá el cuento, mito o leyenda propuesto para la clase. (20 min.)

2.       Se dividirá en cuatro grupos y cada uno deberá responder una pregunta (30 min.):
·         Grupo 1: ¿Qué aspectos o evento se explica a través de este cuento?
·         Grupo 2: ¿Qué valores sobresalen?
·         Grupo 3: ¿Por qué creen que los pueblos recurren a los cuentos y leyendas para explicar valores o fenómenos naturales?
·         Grupo 4: ¿A través de los personajes, como se imaginan a este pueblo?

3.       Un representante de cada grupo explica su respuesta (20 min.):

4.       El docente complementará las reflexiones de los estudiantes con una explicación de la importancia de los cuentos y leyendas para las culturas ancestrales y explica, en este caso, sobre el pueblo Pache. (15 min)

5.       Se formarán 4 equipos y para la siguiente clase, cada uno tiene que investigar (preguntar a personas, buscar en la biblioteca o internet) cuentos o leyendas tradicionales que expliquen aspectos importantes de una cultura. Para que no se repitan las historias, el profesor les asignará ciudades. (5 min.)

SEGUNDA SESIÓN: “Descubriendo historias” (Duración 1:30)

1.       Cada grupo contará a sus compañeros el cuento o leyenda que encontraron. Podrán utilizar los recursos que consideren necesarios para hacerlo más dinámico y atractivo. Ejem: podrán actuar, utilizar un escenario, dibujos, música, etc. (45 min.)  

2.       Luego tendrán que explicar: (20 min.)
a) ¿Cómo lo consiguieron?
b) ¿Qué es lo que más les gustó del cuento que escogieron?
c) ¿Qué otras cosas descubrieron del pueblo?

3.       Se abrirá un conversatorio donde todos los grupos deberán opinar sobre: (20 min.)
a)      ¿Qué aspectos de estos cuentos persisten en la actualidad?
b)      ¿Qué tema actual les gustaría explicar a través de un cuento?

4.       Cierre (5 min.): El profesor reflexionará sobre la importancia de estas manifestaciones culturales.

Autora                         
Erika Donoso N.



[1] Tomado del Libro ‘Cuentos y leyendas hispanoamericanos’, GARRALÓN, Ana, Elección, adaptación y comentarios; Editorial ORYMU, SA, octubre 2005, España.





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                                                  Actividad realizada por Jhaqueline Euán Pérez

La Xtabay[1]
 Vivían en un pueblo dos mujeres; a una la apodaban los vecinos la XKEBAN, que es como decir la pecadora, y a la otra la llamaba la UTZ-COLEL, que es como decir mujer buena. La XKEBAN era muy bella, pero se daba continuamente al pecado de amor. Por esto, las gentes honradas del lugar la despreciaban y huían de ella como de cosa hedionda. En más de un ocasión se había pretendido lanzarla del pueblo, aunque al fin de cuentas prefirieron tenerla a mano para despreciarla. La UTZ-COLEL, era virtuosa, recta y austera además de bella. Jamás había cometido un desliz de amor y gozaba del aprecio de todo el vecindario.
                No obstante sus pecados, la XKEBAN era muy compasiva y socorría a los mendigos que llegaban a ella en demanda de auxilio, curaba a los enfermos abandonados, amparaba a los animales; era humilde de corazón y sufría resignadamente la injurias de la gente. Aunque virtuosa de cuerpo, la UTZ-COLEL era rígida y dura de carácter: Desdeñaba a los humildes por considerarlos inferiores a ella y no curaba a los enfermos por repugnancia.
                Recta era su vida como un palo enhiesto, pero sufrió su corazón como la piel de la serpiente. Un día ocurrió que los vecinos no vieron salir de su casa a la XKEBAN, pasó otro día, y lo mismo; y otro, y otro. Pensaron que la XKEBAN había muerto abandonada; solamente sus animales cuidaban su cadáver, lamiéndole las manos y ahuyentándole las moscas. El perfume que aromaba a todo el pueblo se desprendía de su cuerpo. Cuando la noticia llegó a oídos de la UTZ-COLEL, ésta rió despectivamente.
                Es imposible que el cadáver de una gran pecadora pueda desprender perfume alguno- exclamó. Más bien hederá a carne podrida. Pero era mujer curiosa y quiso convencerse por sí misma. Fue al lugar, y al sentir el perfumado aroma dijo, con sorna: Cosa del demonio debe ser, para embaucar a los hombres, y añadió: Si el cadáver de esta mujer mala huele tan aromáticamente, mi cadáver olerá mejor. Al entierro de la XKEBAN solo fueron los humildes a quienes había socorrido, los enfermos a los que había curado; pero por donde cruzó el cortejo se fue dilatando el perfume, y al día siguiente la tumba amaneció cubierta de flores silvestres.
                Poco tiempo después falleció la UTZ-COLEL, había muerto virgen y seguramente el cielo se abriría inmediatamente para su alma. Pero ¡Oh sorpresa! contra lo que ella misma y todos habían esperado, su cadáver empezó a desprender un hedor insoportable, como de carne podrida. El vecindario lo atribuyó a malas artes del demonio y acudió en gran número a su entierro llevando ramos de flores para adornar su tumba: Flores que al amanecer desaparecieron por "malas artes de demonio", volvieron a decir.
                Siguió pasando el tiempo, y es sabido que después de muerta la XKEBAN se convirtió en una florecilla dulce, sencilla, olorosa llamada XTABENTUN. El jugo de esa florecilla embriaga dulcemente tal como embriagó en vida el amor de la XKEBAN. En cambio, la UTZ-COLEL se convirtió después de muerta en la flor de TZACAM, que es un cactus erizado de espinas del que brota una flor, hermosa pero sin perfume alguno, antes bien, huele en forma desagradable y al tocarla es fácil punzarse.
                Convertida la falsa mujer en la flor del TZACAM se dio a reflexionar, envidiosa, en el extremo caso de la XKEBAN, hasta llegar a la conclusión de que seguramente porque sus pecados habían sido de amor, le ocurrió todo lo bueno que le ocurrió después de muerta. Y entonces pensó en imitarla entregándose también al amor. Sin caer en la cuenta de que si las cosas habían sucedido así, fue por la bondad del corazón de la XKEBAN, quien se entregaba al amor por un impulso generoso  natural. Llamando en su ayuda a los malos espíritus, la UTZ-COLEL consiguió la gracia de regresar al mundo cada vez que lo quisiera, convertida nuevamente en mujer, para enamorar a los hombres, pero con amor nefasto porque la dureza de su corazón no le permitía otro.
                Pues bien, sepan los que quieran saberlo que ella es la mujer XTABAY la que surge del TZACAM, la flor del cactus punzador y rígido, que cuando ve pasar a un hombre vuelve a la vida y lo aguarda bajo las ceibas peinando su larga cabellera con un trozo de TZACAM erizado de púas. Sigue a los hombres hasta que consigue atraerlos, los seduce luego y al fin los asesina en el frenesí de un amor infernal.



[1] Tomado de: http://mexicolindoyquerido.com.mx/mexico/index.php?option=com_content&view=article&id=913:la-leyenda-de-xtabay-mexico&catid=193:mitos-y-leyendas-mexicanos&Itemid=70
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Título
La Xtabay
Autor                                                               
Dominio popular
Tipo de cuento                        
Leyenda
Sinopsis                        
En un lugar de la región maya de México vivían dos mujeres, una dedicada a la prostitución, Xtabay (mujer mala) por lo cual era señalada por todos como la pecadora, y otra llena de virtudes, que era querida por todo el pueblo,   Uts-Ko’olel. Sin embargo, el actuar de ambas mujeres iba en contra de lo que la gente de su pueblo quería, la Xtabay era generosa, humilde, ayudaba al prójimo, mientras que la Uts- Ko’olel era egoísta, ambiciosa e hipócrita.
Aunque la gente del pueblo pensó hasta en matar a la Xtabay, finalmente esta muere sola y, luego de ser enterrada, de su tumba surgen bellas flores y deliciosos aromas. Al poco tiempo cuando fallece la ‘virtuosa’ Uts- Ko’olel, de su tumba sólo brotó podredumbre y mal olor.
Enseñanza                 
Las personas valen por lo que son y no por lo que parecen. No debemos juzgar a las personas por la actividad que se dedican.

 PROPUESTA DE ACTIVIDAD

Objetivo general
Promover la reflexión entre los adolescentes para un auto-reconocimiento
Objetivos específicos                       
·         Estimular el respeto y aceptación a la diversidad.
·         Mejorar la convivencia entre los estudiantes
·         Aprovechar el uso responsable y con fines educativos de la red social de Facebook.
Público
Estudiantes de tercero de secundaria (entre 14 y 15 años de edad).
Duración
Una semana de implementación con sesiones de una hora diaria.
Trabajar con grupos de 25 integrantes.
Desarrollo de la actividad                     
·         Presentación de la actividad con los estudiantes.
·         Selección de responsable para la creación del perfil de Facebook.
·         Difusión de la historia de la Xtabay a través de un grupo de Facebook.
·         El profesor dividirá al grupo en grupos de 5 integrantes, cada uno deberá buscar materiales vinculados a la historia para subir y difundir por el perfil de Facebook.
·         Durante una clase, se realizará un maratón narrativo para que los alumnos cuenten la historia de la leyenda de la Xtabay. Cada representante de un equipo narrará por 2 minutos fragmentos de la historia, hastar concluir.
·         Posteriormente, los estudiantes deberán identificar un caso de la vida cotidiana donde se reflejen similitudes con la historia de la Xtabay. Con el objetivo de rescatar los valores que promueve esta leyenda.
·         En Facebook los alumnos difundirán materiales como “las nuevas Xtabay” u otro tipo de archivos que nos remonten a la historia pero a través de casos reales entorno a los prejuicios a personas o grupos.
·         La Xtabay será el punto de partida para difundir, en esta red social, leyendas populares que promuevan diversos valores como el respeto y aceptación a la diversidad.

Creadora de la actividad
Jhaqueline Euán Pérez



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                                            Actividad realizada por Virginia Morales Herrera

                                                           La Malinche


La Malinche fue una mujer indígena; ahora es un personaje histórico en el contexto de la conquista de los españoles a nuestra tierra ahora conocida como México (entre 1519-1525). Existen varias versiones alrededor de este personaje, el cual por circunstancias de su entorno, se convirtió en la más emblemática intérprete, una de las razones por ser la primera de la que se tienen registros en la historia, dando origen a esta actividad, en la que ella al hablar náhuatl y maya, se comunicaba con Jerónimo de Aguilar, intérprete de la lengua maya que ayudaba a Hernán Cortés, así Aguilar podía traducir del maya al castellano. Lengua que más tarde, la Malinche (Doña Marina, nombre con el que fue bautizada al cristianismo) dominaría y le permitiría un mayor entendimiento con los españoles.

Muchos la han nombrado como una traidora a su pueblo, a sus raíces, a su cultura; por dar a Hernán Cortés información acerca de cómo los indígenas se desenvolvían, aspectos que les eran muy útiles a los españoles. Sin embargo, otros afirman que fue una figura diplomática que intercedió para que no se derramara más sangre en los enfrentamientos entre españoles e indígenas.
La Malinche tuvo un hijo de Hernán Cortés, Don Martín Cortés, quien sería el primer mestizo históricamente importante, ya que al igual que ella, muchas indígenas fueron dadas a los españoles, por ende la mezcla entre las dos culturas comenzó a darse, generando como resultado a como ahora nos llamamos: “mexicanos”. Por eso, algunos otros la llaman “la madre de la nueva patria”, “la madre de México”.
Hay versiones que mencionan el origen de la leyenda de “la llorona” con la Malinche, quien al pasar de los años sigue lamentándose por lo sucedido en su época, de ésta han surgido muchas historias que la gente ha ido contando y por ende modificando la información, por lo que se vuelven leyendas o mitos de nuestra cultura y de nuestra historia.

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Título                                        
La Malinche
Autor                                                    
Bonnie Holmes
Tipo de cuento                       
Histórico
Sinopsis                                   
La Malinche (Doña Marina, nombre con el que fue bautizada al cristianismo) fue una mujer indígena que durante la conquista española de los pueblos indígenas precolombios se convirtió en intérprete de Hernán Cortés, así Aguilar podía traducir del maya al castellano.
Muchos la consideran una traidora a su pueblo por dar a Hernán Cortés información sobre los indígenas. Sin embargo, otros la consideran una figura diplomática que intercedió para que no se derramara más sangre en los enfrentamientos entre españoles e indígenas.
Enseñanza                               
La trascendencia que tienen aquellos estereotipos originados por la misma historia.



PROPUESTA DE ACTIVIDAD


Objetivo general          
Realizar un análisis comparativo de estereotipos
Objetivos específicos                      
·         Conocer el origen del término “malinchismo”, utilizado en la actualidad en México en referencia a que se prefiere lo del extranjero más que lo de tu propio país.
·         Que los alumnos analicen la figura de la Malinche como mujer, sus características, su entorno y puntualizar aspectos en los que actualmente tiene el papel de la mujer en nuestra sociedad.
·         Analizar a partir del estereotipo de la Malinche, las connotaciones surgidas posteriormente y que han dado origen a otras historias, mitos ó leyendas, por ejemplo: la leyenda de la llorona.
Público                           
Estudiantes del último año de la carrera universitaria (alumnos de entre 22 y 23 años.
Duración                        
2 horas
Materiales                     
·         Bibliografía ó fuentes electrónicas que traten sobre la época de la conquista de los españoles.
·         Bibliografía acerca de estereotipos
·         Videos comparativos que traten sobre estereotipos que existen y que pueden ejemplificar mejor el tema (no es necesario que los audiovisuales hayan sido creados desde este enfoque, sino que a criterio de los alumnos dicho material sirva para realizar la comparación.
·         Proyector
·         Ordenador
·         Diversos elementos con los que se puedan generar sonidos.
Procedimiento            
·         Formación de equipos de 3 personas
·         Investigación fuera del aula (bibliografía impreas ó digital) de la época de la Conquista Española en México lo que les permitirá tener el contexto de la historia.
·         Puntualizar los estereotipos que los alumnos encuentren aquella época y aún son parte de la actualidad.
·         Realización de un cuento acerca de la comparación entre la Malinche y la llorona, haciendo énfasis en crear 3 personajes (ya que son 3 integrantes en cada equipo) que representarán cada uno a 3 estereotipos que se hayan encontrado e interpretado.
·         Cada equipo contará su cuento, además de apoyarse en recursos sonoros reales, como por ejemplo: instrumentos musicales.
·         Los alumnos realizarán un análisis posterior de los 3 estereotipos que hayan elegido para la realización de su cuento. En donde propongan cómo pueden moldear la percepción que se tenga de ellos y su aplicación en la actualidad.
Fuentes electrónicas

http://cat.middlebury.edu/~gacetahispanica/trabajos/LavisiondeLaMalinche_Bholmes.pdf
http://www.tihof.org/honors/malinche-esp.htm
Autora                        
Virginia Morales Herrera


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                                                                          Actividad realizada por Leina Cai

                                                       El cazador Hailibu
Tiempo atrás vivió un hombre llamado Hailibu, como se ocupaba de la caza todos lo conocían como “el cazador Hailibu”. Como siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás, nunca disfrutaba solo de las cosas que cazaba sino que las repartía, por lo cual se había ganado el respeto de todo el mundo.
                        Un día que fue a cazar a la profundidad de la montaña, divisó entre la espesura del bosque una serpiente blanca que dormía enrollada bajo un árbol. El hombre dio un rodeo, pisando suavemente para no despertarla. De súbito bajó del cielo una grulla gris que atrapó a la serpiente con sus garras y volvió a emprender vuelo. La serpiente se despertó sobresaltada gritando: ¡socorro!, ¡socorro! Hailibu aprontó su arco y su flecha y le apuntó a la grulla que iba subiendo hacia la cima de la montaña. El ave perdió a la serpiente y huyó.
                - Pobre pequeñita, ve rápido a buscar a tus padres. – Le dijo el cazador al reptil. Este asintió con la cabeza, expresó las gracias y se perdió entre los arbustos mientras Hailibu recogía su arco y las flechas para retornar también al hogar.
                Al día siguiente, cuando Hailibu pasaba justamente por el mismo sitio de la víspera varias serpientes que rodeaban a la blanca salieron a recibirlo. Asombrado, estaba pensando en dar un rodeo cuando la serpiente blanca le habló:
                - ¿Cómo está, mi salvador? Tal vez no me conozca, yo soy la hija del rey dragón. Ayer usted me salvó la vida y hoy mis padres me han ordenado que venga especialmente a recibirle para acompañarle a mi casa, donde le darán las gracias en persona. Cuando llegue allá – continuó – no acepte nada de lo que le ofrezcan mis padres, pero pida la piedra de jade que lleva mi padre en la boca. Si Ud. se pone esa piedra en la boca podrá entender todos los idiomas de los animales que hay en el mundo. Sin embargo, lo  que usted escuche no podrá comentárselo a nadie más. Si lo hiciera, se convertiría en una piedra.
                Hailibu asintió, siguiendo a la serpiente hasta la profundidad del valle donde el frío iba creciendo a cada paso. Cuando llegaron a la puerta de un depósito la serpiente dijo:
                - Mis padres no pueden invitarlo a pasar a la casa, lo recibirán aquí.
                Y justo cuando estaba explicando esto el viejo dragón apareció y le dijo muy respetuosamente:
                - Usted ha salvado a mi querida hija y yo se lo agradezco sinceramente. En este depósito se guardan muchos tesoros, usted puede tomar lo que desee sin ningún cumplido. – Y dicho esto abrió la puerta instando a Hailibu para que entrara; el cazador notó que estaba repleto de tesoros. Una vez que terminaron de ver este lugar, el viejo dragón acompañó a Hailibu a visitar otro, y así recorrieron ciento ocho; a pesar de ello, Hailibu no se decidió por cosa alguna.
                - Buen hombre, ¿ninguno de estos tesoros te place? – preguntó el viejo dragón con un poco de embarazo.
                - A pesar de que son muy buenos sólo se pueden utilizar como hermosos adornos pero no tienen utilidad para mí que soy un cazador. Si el rey dragón desea realmente dejarme algo como recuerdo le ruego que me entregue ese jade que tiene en su boca.
                El rey dragón se quedó absorto un momento; no le quedaba más remedio que escupir, con mucho dolor, la piedra que tenía en su boca y dársela a Hailibu.

                Después de que el cazador se despidió saliendo con la piedra en su poder la serpiente blanca lo siguió y le recomendó repetidas veces:
                - Con esta piedra podrá enterarse de todo. Pero no puede decirle a nadie ni palabra de lo que sepa. Si lo hace se encontrará en peligro. Por nada del mundo se olvide de ello.
                Desde entonces Hailibu lograba cazar muy fácilmente. Podía entender el lenguaje de las aves y las bestias y de este modo saber qué animales había al otro lado de la gran montaña. Así pasaron muchos años hasta que un día que llegó cazar al lugar escuchó que unos pájaros decían:
                - Vayamos pronto a otro sitio. Mañana se va a derrumbar la montaña y el agua correrá a torrentes inundándolo todo. ¡Quién sabe cuántos animales morirán!
                Hailibu se quedó muy preocupado; sin ánimo ya para cazar regresó de inmediato y le anunció a todos:
                - ¡Mudémonos a otro sitio! En este lugar ya no se puede vivir más. ¡Quien no lo crea después no tendrá tiempo para arrepentirse!
                Los demás se quedaron muy extrañados. Algunos creían que aquello era imposible, otros, que Hailibu se había vuelto loco. En resumen, nadie le creía.
                - ¿Acaso esperan a que yo muera para creerme? – preguntó Hailibu llorando de los nervios.
                - Tú nunca nos has mentido – opinaron unos ancianos – y eso lo sabemos todos. Pero ahora dices que aquí ya no se puede vivir más. ¿En qué te basas? Te rogamos que hables claro.
                Hailibu pensó: “Se aproxima la catástrofe, ¿cómo puedo pensar en mí mismo y permitir que todos los otros sufran la desgracia? Prefiero sacrificarme para salvar a los demás.”
Relató pues cómo había obtenido la piedra de jade, de qué modo la utilizaba para cazar, la forma en que se había enterado de la catástrofe que iba a sobrevenir por boca de los pájaros y por último el porqué no podía contarles a los demás lo que escuchaba de los animales: se convertiría en piedra muerta. Al tiempo que hablaba Hailibu se iba transformando y poco a poco se fue haciendo piedra. Tan pronto la gente vio aquello se apresuró a mudarse, con mucho dolor, llevándose a sus animales. Entonces las nubes formaron un espeso manto y comenzó a caer una torrencial lluvia. En la madrugada siguiente se escuchó en medio de los truenos un estruendo que hizo temblar la tierra y la montaña se derrumbó mientras el agua fluía a borbotones.
                - ¡Si Hailibu no se hubiera sacrificado por nosotros ya habríamos muerto ahogados! – exclamó el pueblo emocionado.
                Más tarde, buscaron la piedra en que se había convertido Hailibu y la colocaron en la cima de la montaña, para que los hijos y los nietos y los nietos de los nietos recordaran al héroe Hailibu que ofrendó su vida por todos. Y dicen que hoy en día existe un lugar que se llama “La piedra Hailibu”.


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Título :
El cazador Hailibu
Compilador :
Desconocido (antigua leyenda mongol)
Tipo de cuento :
Fábula
Sinopsis :
El cazador Hailibu siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás, por lo cual se había ganado el respeto de todo el mundo. Un día, Hailibu fue a la montaña  para cazar, y una vez salvó la vida de la hija del Rey Dragón. El Rey Dragón le recompensó dándole una piedra filosofal, con la cual Halibu podría entender todos los lenguajes de los animales; pero en repetidas le dijo que sólo él podría saberlo; no podría contárselo a la gente, pues una vez que se lo dijera a los demás se convertirá en una piedra que nunca iba a resucitar. Hailibu recordó esas palabras por muchos años, les dió sus cacería a sus paisanos. Un día que él fue a la caza en las montañas, un grupo de aves estaba diciendo que la montaña se derrumbaría esa noche y las inundaciones sumergirían la aldea. Halibu regresó rápidamente a la aldea y habló con los paisanos, pero los estos no le creían. Para salvar a los aldeanos, Hailibu dijo el secreto, y se convirtó en una piedra. Toda la aldea entera sobrevivió, ellos siempre veneraron la memoria del cazador Hailibu.
Enseñanza :
Sacrificio personal en favor de la comunidad es una gran virtud.







PROPUESTA DE ACTIVIDAD

Objetivo general :

Estudio de las diferencias culturales chinos y occidentales
Objetivos específicos:
Ø  Análisis del carácter común y elcarácter Individuales del pensamiento tradicional chino.
Ø  Investiga de ¨sacrificio¨ es universal.
Público :
Estudiantes de estudios del intercambio culturales
Duración :
2 horas
Materiales :
Ø  Ordenador, equipo de proyección.
Ø  Pizarra y plumas.
Procedimiento :
1. Los estudiantes leerán el cuento en texto.                        (8mins)
2.Presentar el video de YOUTUBE, (producto de 1985)            (20mins)
 3. Analizar con los estudiantes sobre los conjuntos de caráteres.(peinado extraño, aspecto como niño)
Breve descripción de la historia y la cultura de Mongol.                                               10mins
 4. Presentar los siguientes argumentos y discutir con estudiantes:   80mins                
²  ¿Cuáles son las virtudes de Hailibu? A menudo con los servicios colectivos. Análisis del Carácter Común y El Carácter Individuales.
 ²  Hailibu fue muy popular por sus paisanos, era una persona casi perfecta. En China siempre forma la imagen los líderes perfectos.
¿Por qué los paisanos no le creen sobre la inundación?
 ²  En el mundo occidental, hay cuentos similares, como “Prometeo honrado principalmente por robar el fuego de los dioses”. El héroe está sacrificio para el publico, una idea mundial?